martes, 22 de noviembre de 2016

Plaza de España - Lugo

El amplio cuadrilátero de la PLAZA DE ESPAÑA se abre hoy allí donde el núcleo medieval extendió sus huertas y modestas construcciones bajo la denominación Cortiños de San Román.
Su lado norte coincide con un tramo del gran eje que recorrían los peregrinos y su superficie de poniente estuvo ocupada por la fábrica del convento de Agustinas. Hacia levante, con un marcado distanciamiento, Pedro de Artigas construyó la Casa Consistorial en el siglo XVI y, durante la misma centuria, el nuevo seminario se sitúa ocupando unos solares del mediodía. La proximidad de estos importantes edificios con amplio espacio entre ellos permitió formar una plaza enmarcada por sus respectivas fachadas. La consolidación definitiva de tal espacio como centro de convivencia ciudadana se realiza en el siglo XVIII al decidirse la reconstrucción del Consistorio para presidir la plaza con el ornamento y localidad que son habituales en los ayuntamientos barrocos.
No obstante, su perímetro actual, amplio trapecio de 121 por 76 m., con suave pendiente E-O, es fruto del siglo XIX cuando el derribo del desamortizado convento de Agustinas (1840) hizo posible su ampliación regular. Hacia este gran recinto, convertido en punto neurálgico del Lugo decimonónico, se abren entonces nuevas calles - la de la Reina - inaugurada por Isabel II en 1854, y la del Obispo Aguirre, ya a finales de siglo - y su espacio central es objeto de un cuidado tratamiento. Parte de los antiguos terrenos de las Agustinas se rellenan con una plantación de negrillos cuyo gran desarrollo actua de una forma muy eficaz como reductor del espacio, mientras que, en el resto del recinto, predomina la jardinería y un arbolado más transparente. Tambien sus funciones estám diferenciadas: el área de negrillos se convirtió en paseo de verano con bancos perimetrales y superficie enarenada; a continuación, un espacio en torno al quiosco donde se celebran conciertos de música que atraen a numeroso público y, por último, una amplia zona con la fuente monumental cuya gran matrona y leones de hierro habían sido fundidos por la fábrica de Sargadelos en 1861.
Al mismo tiempo se fueron transformando los inmuebles que conformaban las distintas alineaciones de la plaza. El Consistorio añade a su arquitectura barroca la torre del reloj (1873). En el lado sur, el convento de San Francisco sustituye al antiguo seminario y, haciendo esquina con la calle del Obispo Aguirre, el Círculo de las Artes, la Sociedad recreativa y cultural de más empaque por aquellas fechas, inaugura su nueva sede social. Mientras tanto, en la alineación septentrional, los viejos inmuebles asoportalados se van renovando con atractivos locales comerciales siguiendo un proceso que integrará en estrecha convivencia edificios diezochescos y decimonónicos. Bajo sus soportales se realiza el paseo de invierno cuya animación, cuando el tiempo lo permite, se extiende al espacio inmediato, el llamado Cantón, magníficamente orientado hacia mediodía.
Hoy, cuando aun pervive en esta plaza parte de aquella vitalidad como lugar por excelencia de comercio, encuentro y paseo, su amplia superficie central sigue manteniendo la ordenación anterior, exceptuando el extremo de levante donde se han trazado los nuevos jardines de la Media Luna al trasladarse a otro lugar la vieja fuente de Sargadelos cuyos leones permanecen, sin embargo, flanqueando las escaleras de acceso a la zona de poniente. También el contorno arquitectónico ha experimentado algunas transformaciones. En los años 30 se reconstruyen los dos edificios inmediatos a la calle del Doctor Castro, cuyos volúmenes y módulos contrastan con la edificación anterior. Más tarde, siguiendo los mismos criterios, fueron sustituidos los edificios del hotel Méndez Núñez con inconvenientes y de exagerados volúmenes, mientras que en el lado del mediodía se produjeron otras renovaciones puntuales de características semejantes y en la fachada del poniente se iniciaron derribos que aún mantienen sin resolver el cierre de este lateral. 

(La plaza en la ciudad)

No hay comentarios: