domingo, 1 de marzo de 2015

Paseo de Gracia - Barcelona

El Paseo de Gracia es una de las avenidas principales de Barcelona y una de las avenidas más famosas de Cataluña, debido a su importancia turística, áreas comerciales, negocios y un gran escaparate de destacadas obras de arquitectura modernista, como las edificaciones de los arquitectos Antoni Gaudí y Lluís Domènech i Montaner, declaradas Patrimonio de la Humanidad. La avenida está situada en la parte central de la ciudad, el Ensanche barcelonés, y conecta la plaza de Cataluña al este con la calle Mayor de Gracia al oeste.
Puede ser parecida por popularidad a la Avenida de los Campos Elíseos, por otro lado es la segunda de las calles más caras de España en referencia sobre todo al alquiler. A nivel español le precedía la calle Preciados (Madrid), que ocupaba el primer puesto hasta 2010, año en que la Avenida del Portal del Ángel de (Barcelona) pasó a ser la calle más cara de España.
Historia
El antiguo camino de Jesús, de tipo rural y con huertos en ambos lados, era la vía principal para ir del municipio de Gracia, que fue independiente de la ciudad condal hasta 1897, hasta Barcelona, por donde se entraba a través del portal del Ángel.
En 1821 el ayuntamiento de Barcelona presentó el primer proyecto de urbanización, obra de Ramón Plana. Debido a las epidemias que asolaron la ciudad en aquella época, el proyecto tuvo que detenerse. En 1824 regresó el absolutismo a España y el proyecto se reanudó con el capitán general de Cataluña Francisco Bernaldo de Quirós, marqués de Campo Sagrado. El paseo, inaugurado en 1827, tenía 42 metros de ancho y fue el lugar favorito de la aristocracia para exhibir sus habilidades en el arte de montar a caballo y sus coches lujosos durante todo el siglo XIX. Por esta época, el Paseo era uno de los lugares de recreo más conocidos de la ciudad, con cafés, restaurantes, salas de baile, atracciones y teatros.
Este paseo debía ser un eje determinante en el proceso de instauración del proyecto del Ensanche barcelonés ideado por Ildefonso Cerdá. Un proyecto que duró las tres décadas que comprendieron entre los años años 60 y años 90 del siglo XIX. Alrededor del paseo se definió un núcleo residencial de baja densidad constituido en gran parte por edificios unifamiliares. En la última década del siglo, poco a poco todo el sector de la ciudad fue adquiriendo un protagonismo comercial atrayendo la burguesía, que hizo que se fueran substituyendo las casas aisladas con jardín por edificios de pisos.
Finalmente, entre 1900 y 1914, el paseo de Gracia se consolidó como el principal centro residencial burgués con la aportación creativa de los arquitectos modernistas Gaudí, Puig i Cadafalch, Domènech i Montaner o Sagnier. Ellos dignificaron las construcciones existentes y edificaron casas nuevas con formas bien singulares, como la casa Milà, la casa Batlló, casa Lleó Morera o la casa Amatller. En 1906, el arquitecto Pere Falqués diseñó los famosos bancs-fanals de trencadís distribuidos a lo largo del paseo.

No hay comentarios: